Tendencia actual, sensación futura

El paso del tiempo nos ha brindado una amplia gama de estilos que podríamos denominar de “época”, tales como: el renacentista, ardecó, barroco, modernista, etcétera; estilos que más allá de ser una moda, resultan ser una tendencia y, muchas veces, base para los actuales estilos en la arquitectura.

Actualmente, el estilo Contemporáneo, nutrido con su predecesor el Modernista,  es la tendencia arquitectónica con la cual se realizan la mayoría de los proyectos en las diferentes ciudades o pueblos hoy en día. 

Aunque poca gente puede diferenciar ambos estilos rápidamente, debemos especificar que el Contemporáneo basa sus diseños en la utilización de volúmenes geométricos, la sencillez en los detalles y la poca o nula utilización de ornamentas.

Sin embargo, su característica esencial es: reutilizar y rediseñar los espacios para que se ajusten a las necesidades de las personas y estén en armonía con el medio ambiente. 

Es normal que, los grandes ventanales y espacios amplios, tipo loft, sean parte esencial de este estilo, ya que normalmente las construcciones se realizan en torno del ambiente y priorizan el uso de la luz del sol.

Aunque muchos de los materiales utilizados son el granito, asfalto y metal (materiales preponderantes en el estilo moderno), también recurre a materiales como la piedra rústica y madera, lo cual no sólo une la estructura con el ambiente, sino que brinda una sensación de calidez.

El estilo Contemporáneo tiene un impacto fuerte en el gusto de las personas en la actualidad ya que, además de utilizar líneas limpias en los diseños, nos brinda la sensación de estar avanzando, de tener una visión del futuro, por ello, es interesante vislumbrar algunas estructuras contemporáneas inmersas en lugares antiguos o tradicionalistas. 

Tips       

•  Así como el estilo loft, el contemporáneo utiliza espacios amplios y normalmente divididos.

• Los colores más utilizados son los neutros para interiores combinados con la calidez de maderas o acabados con piedras rústicas.

• Para las fachadas se pueden utilizar colores blancos o bien, colores que contrasten con el ambiente, por ejemplo colores básicos que contrastan con el asfalto de la ciudad.

• La utilización de ornamenta se asemeja más al estilo minimalista, sin caer en el exceso.